Luego de que tres sujetos ingresarán al estacionamiento de un edificio en Belo Horizonte, Brasil, para robar algunas bicicletas, un joven, sin temor de confrontar a los amantes de lo ajeno, bajó hasta el estacionamiento por medio de el ascensor, se soltó el pelo y desenvainó una katana para acorralar a los ladrones.
El “Samurái BH”, como la gente decidió nombrarlo, logró ahuyentar a los ladrones, dejando las bicicletas abandonadas en la calle, para posteriormente el héroe regresarlas al interior de el edificio.
La hazaña fue captada por cámaras de vigilancia y posteriormente subido a redes sociales, donde el joven fue aplaudido y reconocido por su gran valor.
El joven dio a conocer qué las bicicletas no eran de él, pero que ya era la cuarta vez que ingresaban al edificio para robar.